El 30 de octubre de 2015, la empresa atunera Seatech International paró su producción y cerró durante dos semanas su planta de Cartagena, Colombia, dejando durante ese tiempo sin empleo y sin ingresos a más de mil personas, en su gran mayoría mujeres cabeza de familia.
Ante esta situación, y como acto de protesta, un grupo de 125 mujeres afiliadas a la Unión Sindical de Trabajadores de la Industria Alimenticia (USTRIAL) decidió permanecer dentro de la planta en toma pacífica. Tres días después, a solicitud de la gerencia de la empresa, el Escuadrón Móvil Antidisturbios desalojó a las trabajadoras violentamente, empleando gases lacrimógenos.