Pakistán - Brutal represión de trabajadores y sindicalistas en la Merck Factory de Quetta (2010)

Trabajadores de la fábrica alemana MNC Merck Marker Quetta se quejaron de los bajos salarios que tenían los trabajadores subcontratados, quienes representan casi dos tercios del personal. La dirección respondió con amenazas de cierre de la fábrica y amenazas directas de despido. Después del despido de 24 empleados en junio, los trabajadores formaron un comité de acción de la fábrica y dejaron de hacer horas extras. A pesar de las negociaciones entre los representantes sindicales y las autoridades provinciales, el 10 de julio la fábrica procedió a poner en ejecución su amenaza de despido de al menos 252 trabajadores subcontratados. La empresa presentó una denuncia ante la policía contra ocho dirigentes sindicales, mientras que el Secretario General del Merck Employees’ Union, Manzoor Baloch, fue arrestado y acusado de asesinato, de alteración de la ley y el orden y de terrorismo. Fue liberado tras permanecer un mes en detención. Tras nuevas protestas, las fuerzas del Gobierno local atacaron y detuvieron a 120 trabajadores de Merck por delitos penales. El Secretario General de la Pakistan Workers Federation en la región, Haji Muhammad Ramzan Achakzai, también fue detenido por cargos penales por apoyar a los trabajadores de Merck y a los trabajadores mineros en Quetta (ver el apartado Pésimas condiciones para los trabajadores subcontratados – defensor sindicalista arrestado).

El 9 de agosto, líderes de la Pakistan Workers Federation (PWF) y de la Pakistan Workers Confederation (PWC) llevaron a cabo una concentración en tren a Islamabad, por los despidos improcedentes y las palizas. La PWF también presentó una queja ante la OIT sobre el caso.

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