El sindicato de periodistas National Union of Somali Journalists (NUSOJ) llevaba años luchando contra el intento por parte del Ministerio de Información de instalar en el poder a una dirección paralela y progubernamental y de reemplazar a su Secretario General, Omar Faruk Osman. El NUSOJ parecía haber ganado el proceso judicial que había iniciado para que reconocieran a sus líderes legítimos. Sin embargo, el 4 de febrero de 2016 el Tribunal Supremo resolvió que la asamblea general del NUSOJ celebrada el 28 y 29 de mayo de 2011 había sido ilegal y que la elección de Mohammed Ibrahim como su Secretario General quedaba anulada y sin validez.
Más tarde, sucedieron varios giros imprevistos en la trama. Además de la resolución judicial, el NUSOJ había planeado celebrar una Asamblea General el 13 y 14 de febrero de 2016. Justo la noche antes de la asamblea, el Ministerio de Información solicitó al Ministerio de Seguridad Interna y a la Agencia Nacional de Inteligencia y Seguridad (NISA) que intervinieran e impidieran que la reunión siguiera adelante. A continuación, el Ministerio invitó al sindicato a asistir a una reunión el 13 de febrero para hablar sobre la vía que debían seguir. Los líderes del NUSOJ aceptaron asistir a la reunión tras declarar que estaban abiertos a negociar siempre y cuando se respetaran sus derechos sindicales legítimos. Sin embargo, el Ministerio de Información amenazó con utilizar a las fuerzas de seguridad del Estado para disolver cualquier reunión del sindicato.
En otro giro inesperado, el 20 de marzo de 2016 el Tribunal de Apelaciones de Banadir sacó a la luz una carta en la que afirmaba que el Ministerio de Información había formado un comité de propietarios de medios de comunicación que fijaría la fecha en la que “se celebraría la Asamblea General electiva del NUSOJ”. La carta estaba dirigida a instituciones y funcionarios del gobierno y no al sindicato ni a sus miembros. Como destacó el NUSOJ, el llamado comité de propietarios de medios de comunicación no representaba a los miembros del sindicato ni tenía ningún mandato de la organización sindical.
