El 23 de noviembre de 2016, la dirección de Tri Star Apparel Exports (Pvt) Ltd suspendió tanto al presidente de la sección sindical como al principal organizador del sindicato de trabajadores del comercio y la industria, Commerce and Industrial Workers Union (CIWU), por organizar una huelga.
Los casi 200 trabajadores/as de la fábrica, de los cuales 140 eran miembros del sindicato, experimentaban problemas desde octubre, tales como el retraso en el pago de los salarios, gratificaciones no pagadas a los trabajadores jubilados, la no contribución de la empresa al fondo de seguridad social, como lo exige la ley, y otras dificultades. La fábrica, que ya no surte pedidos de exportación y ahora produce esencialmente para el mercado local, permanece bajo la jurisdicción del Consejo de Inversión, una autoridad de Sri Lanka responsable de las zonas francas de exportación.
La huelga fue convocada el 18 de noviembre, tras el impago de los salarios de octubre de 2016. El personal de oficina, por su parte, no había recibido su sueldo desde hacía tres meses. Vista la situación, la dirección pagó solamente el 30 por ciento de los salarios.
El 25 de noviembre de 2016, la dirección dio licencia a todos los trabajadores hasta el 5 de diciembre sin pagarles el resto de los salarios adeudados. El 5 de diciembre, la fábrica permaneció cerrada y se pidió a los trabajadores que regresaran diez días más tarde para cobrar sus salarios. Sin embargo, el 15 de diciembre la fábrica seguía cerrada. El gerente general de la fábrica informó a los trabajadores que los salarios no podrían pagarse ese día y que la fábrica permanecería cerrada.