La central sindical Ujedinjeni Granski Sindikati Nezavisnost (NEZAVISNOST) ha expresado serias preocupaciones por los ataques persistentes y generalizados contra el diálogo social y la negociación colectiva en el país.
Según NEZAVISNOST, el Estado continúa favoreciendo a los sindicatos profesionales, que no están afiliados a ninguna central nacional, y a sindicatos amarillos, a la hora de emprender negociaciones colectivas a nivel local, sectorial y nacional.
En el sector privado, los empleadores a menudo se niegan a negociar con sindicatos representativos. Por ejemplo, en la compañía eléctrica Elektroprivreda Srbije (EPS), el empleador negoció con el sindicato patronal, excluyendo a todos los sindicatos representativos. Aunque el sindicato de EPS nunca estableció su representatividad a escala nacional, se concluyó un convenio colectivo que se aplicaría en todo el país. Según NEZAVISNOST, muchas multinacionales que operan en Serbia prohíben que sus empleados se sindicalicen y no cumplen con la legislación nacional.
NEZAVISNOST deplora asimismo la escasa cobertura a nivel nacional y sectorial, donde apenas se concluyen convenios colectivos. La negociación colectiva resulta fuertemente frenada por las autoridades, que posponen arbitrariamente el registro y la publicación de los convenios firmados, en ocasiones durante más de un año. Por ejemplo, el Ministerio de Trabajo, Empleo, Veteranos y Asuntos Sociales, que se encarga de registrar los convenios colectivos, pospuso durante ocho meses el registro de los siguientes convenios colectivos sectoriales firmados:
en la industria química y minerales no metálicos de Serbia (firmado el 28 de diciembre de 2015, publicado en la Gaceta Oficial el 14 de septiembre de 2016);
industria de la construcción (firmado el 10 de febrero de 2016, publicado en la Gaceta Oficial el 14 de septiembre de 2016);
en las industrias de la agricultura, alimentación, tabaco y gestión del agua de Serbia (firmado el 28 de enero de 2016, publicado en la Gaceta Oficial el 9 de septiembre de 2016).