El 28 de marzo de 2013, más de 500 trabajadores portuarios en las terminales Hong Kong International Terminals (HIT) se declararon en huelga reclamando mejores salarios y condiciones de trabajo. Ocuparon la entrada principal de las terminales para intentar paralizar las operaciones. No obstante, HIT aplicó una orden judicial de emergencia dictada por el tribunal el 1 de abril de 2013. Los trabajadores fueron obligados a abandonar las terminales, lo que reduciría el impacto de la acción de huelga.