En una conferencia de prensa conjunta con los Ministros de Interior y de Finanzas, se anunció que el Gobierno estaba tomando medidas para restaurar las condiciones de trabajo en el Departamento de Aduanas de Jordania, donde algunos trabajadores habían convocado una huelga reclamando incrementos salariales y ayudas al transporte. El Ministro de Finanzas consideró que la huelga era “injustificada” instando a los trabajadores a reincorporarse al trabajo y poner fin de inmediato a la acción de huelga. El Gobierno recurrió a oficiales de policía para reemplazar a los huelguistas y considera la posibilidad de contratar jubilados como trabajadores de reemplazo.