Georgia - Violencia e incumplimiento de las disposiciones sobre el diálogo social

La dirección de la empresa ferroviaria Georgian Railways comunicó a los trabajadores U. Khvtisiashvili, V. Tsiskarishvili y A. Charelashvili su traslado a unos 150 kilómetros de distancia sin ninguna disposición o asignación para su transporte diario. De conformidad con la legislación laboral de Georgia, todos los cambios sustanciales en las condiciones de trabajo requieren el consentimiento previo de los trabajadores afectados. Mientras los trabajadores y su sindicato, el Independent Railway Workers, intentaban negociar una solución amigable, la dirección de la empresa, que es totalmente propiedad de la República de Georgia, desestimó todas las conversaciones con los trabajadores. Esta negativa llevó al sindicato a tomar medidas legales contra la empresa y puso en marcha acciones de protesta contra la Georgian Railways iniciando una huelga de hambre sentados frente a la sede de la empresa. En lugar de asegurar una mediación y tomar medidas proactivas para resolver el conflicto laboral, las autoridades aprobaron la demolición de la carpa que los manifestantes habían instalado para protegerse. La policía dispersó brutalmente la protesta y detuvo a diez activistas, incluido I. Petriashvili, presidente de la Confederación de Sindicatos de Georgia (GTUC). El Defensor del Pueblo de Georgia, que siguió de cerca la situación, declaró que los trabajadores habían sido privados ilegalmente de la posibilidad de montar su tienda de campaña y, por lo tanto, de ejercer adecuadamente su derecho a la libertad sindical. El Defensor del Pueblo reiteró que una intervención como esta de parte de las autoridades públicas es inadmisible.

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