Liberia
La organización afiliada a la CSI en Liberia es el Liberia Labour Congress (LLC).
Liberia ratificó el Convenio nº 87 sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación (1948) en 1962 y el Convenio nº 98 sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva (1949) en 1962.
según la ley
Libertad sindical / Derecho de sindicalización
Libertad sindical
El derecho a la libertad sindical está consagrado en la Constitución.
Discriminación antisindical
La ley no protege específicamente a los trabajadores/as frente a la discriminación antisindical
Restricciones al derecho de los sindicatos a organizar su administración
- Restriciones al derecho a elegir representantes y autoadministrarse con plena libertad
- El Consejo de control de las prácticas laborales tiene derecho a supervisar las elecciones sindicales.
Categorías de trabajadores a quienes la ley prohíbe o restringe la posibilidad de formar o afiliarse a sindicatos, o de ocupar cargos sindicales
- Otras categorías
- El artículo 1.5 c) i) y ii) de la Ley sobre el trabajo decente de 2015, que regula el derecho a afiliarse y formar sindicatos, excluye de su ámbito de aplicación a los oficiales, los miembros de la tripulación y cualquier otra persona empleada o en formación en los buques.
- Otros funcionarios y empleados públicos
- Los trabajadores de las empresas estatales y de la administración pública no pueden constituir sindicatos.
Derecho a la negociación colectiva
Derecho a la negociación colectiva
El derecho a la negociación colectiva está reconocido por la ley.
Obstáculos legales para el reconocimiento de los agentes de negociación colectiva
- Se requiere una representatividad excesiva o un número mínimo de miembros para poder negociar colectivamente
- La legislación no prevé derechos de negociación colectiva para los sindicatos minoritarios. El apartado a) del párrafo 1 del artículo 37 de la Ley de trabajo decente de 2015 sólo dispone que los sindicatos que representen a la mayoría de los empleados en una unidad de negociación apropiada podrán solicitar el reconocimiento como agentes exclusivos de negociación de esa unidad de negociación. También señala que un sindicato que ya no represente a la mayoría de los empleados de la unidad de negociación debe adquirir la mayoría en un plazo de tres meses; si no lo hace, el empleador retirará el reconocimiento a ese sindicato (artículo 37.1 k)).
Restricciones al principio de negociación libre y voluntaria
- Procedimiento de arbitraje impuesto en caso de disputa durante una negociación colectiva, no sólo en los servicios esenciales
- El artículo 42.1 de la Ley de trabajo decente de 2015 establece que si el Presidente lo considera de interés nacional, podrá: i) pedir al Ministro que nombre un conciliador para conciliar cualquier conflicto, o posible conflicto, entre los empleadores y sus organizaciones, por una parte, y los empleados y sus sindicatos, por otra; o ii) en consulta con el Consejo Nacional Tripartito, nombrar un grupo de personas que representen los intereses de los empleadores, los empleados y el Estado para investigar cualquier conflicto laboral o posible conflicto con el fin de informar y hacer recomendaciones al Presidente.
Restricciones o prohibición de negociar colectivamente en algunos sectores
- Otros funcionarios y empleados públicos
- Los trabajadores de las empresas estatales no gozan del derecho a la negociación colectiva.
Derecho de huelga
Derecho de huelga
El derecho de huelga está reconocido en la legislación
En la Práctica
La situación de los trabajadores de las plantaciones de Firestone Liberia, que había mejorado con la firma, tras más de un año de lucha, de un primer acuerdo con la empresa en 2008, se ha deteriorado nuevamente desde que la presidenta Ellen Johnson Sirleaf concluyera su mandato. Desde entonces, Firestone Liberia no ha hecho sino retractarse constantemente. Según el sindicato de los trabajadores agroalimentarios e Industriales AAIWUL (Agro-Processing and Industrial Workers Union of Liberia), la empresa incumple sus promesas y debilita al sindicato despidiendo ilegalmente a sus dirigentes. El 16 de abril de 2019, la empresa, que es el mayor productor de caucho del mundo, así como el mayor empleador privado en Liberia, justificó el despido de 200 de sus 6.200 trabajadores/as, seguido de otros 400 despidos adicionales a causa de la caída de los precios mundiales del caucho.
Los sindicatos liberianos condenan el despido improcedente de dos dirigentes del sindicato Agricultural, Agro-Processing and Industrial Workers Union of Liberia (AAIWUL), por Firestone Liberia.
Abel Ngigie y Edwin Fallah, presidente y oficial de quejas de una rama local de la AAIWUL en las plantaciones de caucho de Firestone Liberia, fueron despedidos por organizar a los trabajadores.
El sindicato insta a los trabajadores a constituir un frente común frente a esta intimidación y que se centren en las inminentes negociaciones del convenio colectivo. Las relaciones entre los trabajadores y Firestone Liberia han sido siempre turbulentas. En agosto, los trabajadores se declararon en huelga reclamando un incremento salarial para los obreros del caucho, de 8,36 USD a 12,50 USD por día. La empresa no ha atendido aún las demandas de los trabajadores. El octubre, la empresa despidió a 76 trabajadores de su fábrica de madera de caucho.
La dirección de Salala Rubber Corporation ha prohibido toda actividad de carácter político en sus propiedades, con vistas a las elecciones presidenciales y parlamentarias que tendrán lugar en octubre de 2017. La compañía ocupa cerca de 22.000 acres en una zona donde reside un número considerable de votantes incluyendo la circunscripción del actual portavoz de la Cámara de Representantes, que cuenta con el apoyo del Salala Agricultural Workers Union (SAWU). Al parecer la empresa ha amenazado con despedir a cualquier trabajador que encuentre discutiendo de política en el trabajo.
El 20 de marzo de 2017, los sindicatos afiliados a la Internacional de Servicios Públicos organizaron una sentada frente al Ministerio de Justicia para reclamar la reincorporación de los líderes sindicales despedidos y la revisión de la ley que excluye a los empleados de empresas estatales y la Administración pública del derecho a crear un sindicato. El secretario general de la asociación de trabajadores de la sanidad National Health Workers Association of Liberia (NAHWAL) George Poe Williams y su presidente Joseph S. Tamba fueron despedidos el 18 de febrero de 2014 como consecuencia de una huelga nacional que habían organizado. Mellish P. G. Weh y Jayce W. Garniah del sindicato de trabajadores del aeropuerto Roberts International Airport Workers Union (RIAWU) también fueron despedidos a raíz de su activismo sindical. El Gobierno no ha tomado ninguna medida para solucionar el problema de la suspensión del convenio colectivo firmado con RIAWU y la solicitud de registro de NAHWAL, que lleva cuatro años pendiente sin que se haya recibido respuesta alguna por parte del Ministerio de Trabajo.
El 3 de junio, cientos de funcionarios, en colaboración con trabajadores del sector privado, presentaron una petición al Ministro de Trabajo. La petición estaba firmada por representantes de siete sindicatos: los sindicatos de profesionales de la salud, National Health Workers Association of Liberia (NAHWAH) y National Private Sector Health Workers’ Union of Liberia, el sindicato de aeroportuarios Roberts International Airport Workers’ Union (RIAWU), los sindicatos de la educación National Teachers Association of Liberia (NTAL) y Liberian Union of Non-academic Staff and Teachers, el sindicato de funcionarios National Trade Union of Public Service and Allied Workers y la agrupación Civil Society and Trade Union Institutions of Liberia.
La petición abordaba específicamente el caso del secretario general de NAHWAL, George Poe Williams, y su presidente, Joseph S. Tamba, despedidos el 18 de febrero de 014 después de una huelga nacional que encabezaron, así como los despidos de Mellish P. G. Weh y Jayce W. Garniah del Roberts International Airport Workers Union (RIAWU). La petición mencionada asimismo la cuestión de la suspensión de los convenios colectivos firmados con RIAWU y la solicitud de registro de NAHWAL, pendiente desde hace tres años sin haber tenido respuesta alguna del Ministerio de Trabajo. Aunque Liberia ha ratificado los Convenios 87 y 98 de la OIT, los empleados de las empresas estatales y los funcionarios públicos siguen sin poder establecer sindicatos.
En febrero de 2014, la National Alternative Voice of the Voiceless (NAVOV) despidió con efecto inmediato a 20 trabajadores/as de la sanidad a causa de su participación en una huelga. Los trabajadores se habían declarado en huelga para protestar contra las deducciones salariales injustificadas que se venían aplicando desde hace tres años. Anteriormente, la dirección también había amenazado con retirar las licencias profesionales de los trabajadores de la sanidad que tuvieran la intención de hacer huelga.
La compañía Lone Star GSM Communications Corporation (LCC) no ha permitido que los trabajadores elijan a sus representantes sindicales desde 2010. La dirección presiona a los trabajadores para que se establezca una asociación de trabajadores en lugar de un sindicato. Los trabajadores pidieron a la dirección en diversas ocasiones que reconozca su derecho a establecer sindicatos y advirtieron que de lo contrario emprenderían una acción de huelga.
El historial del Gobierno con respecto a la inclusión de la central sindical Liberia Labour Congress (LLC) en los foros tripartitos ha sido desigual. Tampoco ha conseguido impedir que grandes empresas multinacionales vulneren los derechos sindicales. Este año, Arcelor Mittal inició operaciones en Liberia con una inversión multimillonaria que fue muy bien acogida, al haber prometido cierto número de puestos de trabajo a los liberianos. Sin embargo, pronto se forjó una mala reputación por mostrarse injusta y ofrecer malas condiciones laborales, ya que subcontrataba sus puestos de trabajo a otras empresas pagando muy por debajo del salario mínimo y sin ofrecer seguridad laboral. En junio de 2011, el Arcelor Mittal Workers’ Union amenazó con impedir que se llevara a cabo la primera remesa de mineral de hierro de la empresa a menos que ésta publicara cifras de la escala salarial y facilitara la negociación colectiva. Finalmente, a finales de noviembre, la empresa inició negociaciones colectivas con el sindicato.